jueves, 4 de febrero de 2016

La guerra contra Evodio Por Gaby Carmona Astudillo

GABY CARMONA ASTUDILLO
Hemos dicho hasta el cansancio que gobernar un estado como el nuestro no es nada fácil, por el contrario, los intereses claros y oscuros se mueven con frecuencia hasta alcanzar el objetivo, la sumisión del gobernante en turno, su destierro o su entierro político. Los poderes fácticos están más presente que nunca en Guerrero y Acapulco.

Esos poderes claros y oscuros se observaron en el pasado reciente, en donde actuaron con tanta violencia que lograron no solamente incendiar la entidad sino someter al jefe del ejecutivo hasta obligarlo a renunciar al cargo de los guerrerenses le dieron en las urnas, eso no importaba, lo importante para esos poderes es el objetivo, cobrar facturas, humillar, desprestigiar, someter y castigar, y para ello utilizaron  a sus esbirros que el sistema político tiene para cobrar venganza y deshacerse del enemigo o adversario incomodo.

Los esbirros son un grupo de personas malvadas,  dice el diccionario, -que solo obedecen órdenes de sus jefes y de nadie más y esos esbirros están en la Cámara Local de Diputados  y en diferentes partidos políticos con un objetivo común, destruir.

 El alcalde de Acapulco Evodio Velázquez Aguirre es víctima de esos esbirros, a ojo de buen cubero diremos que  los empresarios  son esbirros del sistema, siempre exigiendo hasta alcanzar  su objetivo que es el de seguir gozando de las canonjías que da el poder, para alcanzar descuentos en el impuesto predial, en el agua potable, pero no se ocupan de la remodelación de sus hospederías, restaurantes o centros nocturnos, en donde se rompen todas las leyes, lo importante es que desempeñan su papel al pié de la letra, tal como se les ordena.

La Iglesia Católica, los empresarios, los militares, los medios de comunicación, y la clase política, todos y cada uno de ellos juegan un papel importante en este escenario de descomposición social, económica y política en que se encuentra sumergido el estado y Acapulco. No nos debe extrañar, nada.

Cada uno reclama su pedazo de tierra que le corresponde para demostrar su fuerza, y si sus intereses son tocados,  entonces se dejan sentir con tanta fuerza que logran desterrar o matar políticamente a quienes se les oponga.

No es raro que en Guerrero, esos grupos políticos estén presentes, reclamaron espacios de poder y se les otorgo en el afán de mantener el control, en cada lugar tienen representantes y donde no, buscan a sus aliados políticos (esbirros)  para golpear y atacar. Acapulco no puede ser la excepción a la norma, la llamada Joya de la Corona está en manos del PRD, el partido al que le achacan todos los males, el descontrol, del vacío de poder, la violencia, las muertes, el desorden social.

Los grupos de poder no lo han dejado gobernar desde que llegó al poder, hay quien asegura que un personaje siniestro le ayudó a ganar la presidencia municipal, porque traicionó al otro candidato, del cual no le tenía confianza,  eso, dicen los que saben es lo que se le reclama al joven político Acapulco.

Evodio Velázquez Aguirre emprendió una campaña electoral fuerte, mucho antes de empezar ésta oficialmente, salió airoso a pesar de tener en contra a los perredistas de radicales y los nuevos también, ganó en la mesa y ganó en las urnas.

Le han dicho pequeño dictador, no sé si lo sea, lo que sabemos es que le han orquestado su campaña,  fue amenazado por el responsable de la política interna de éste país, lo menos que le dijo fue ignorante ¿quién es peor?, en lugar de otorgarle todo el respaldo social y político a un edil emanado del voto del pueblo, se le fue encima y la campaña se desató como por arte de magia.

Las mantas surgidas desde la clandestinidad, fueron colocadas cerca de donde despacha, las llamadas telefónicas de amenazas de bomba en el Ayuntamiento, sean dado como siempre, desde la oscuridad para como medida de presión para someterlo.

Evodio encontró al igual que Luis Walton deudas y más deudas, una nomina abultada, y los poderes oscuros  le han asesinado a varios de sus funcionarios, tal como ocurrió en el gobierno de Walton; ambos políticos fueron presionados, Walton se fue antes de concluir, Evodio apenas inicia y las presiones que recibe son enormes.
Los poderes claros, (los que están en el escenario político, a los que todos ven y escuchan) y los oscuros (el crimen organizado, por un lado  y  por el otro, los que copian sus mismos métodos para chantajear, amenazar y matar desde la clandestinidad) ambos buscan someter al edil porteño a como de lugar,  para que ambos sigan siendo dueños de la plaza más peleada del estado y que buscan tener el control total para las próximas elecciones.

Quienes buscan someter al edil porteño,  deben comprender que la sociedad acapulqueña los identifica y en cada proceso electoral habrá de castigarlos con mayor fuerza, porque Acapulco está por encima de intereses políticos y oscuros, ojalá que un día logren comprender eso.  Veremos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.