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| EFRAÍN FLORES IGLESIAS |
Se acerca el cambio de gobernador en la entidad. Se va Rogelio Ortega Martínez y llega Héctor Astudillo Flores al poder.
Se acaban 10 años de gobiernos perredistas y se inaugura a partir del 27 de
octubre un sexenio priista.
Héctor Astudillo recibirá un Guerrero
violento y endeudado. No la
tendrá fácil. Se espera que con el apoyo de la Federación pueda realizar un buen
ejercicio de gobierno.
Cuando era candidato prometió un Guerrero con
orden y paz. Los guerrerenses esperan que lo concrete. No tiene mucho tiempo, pero tampoco es algo
que se lleve a cabo de la noche a la mañana.
No hay que olvidar que la entidad empezó a descomponerse en materia de
seguridad pública en el gobierno de Zeferino
Torreblanca Galindo. Y se recrudeció durante el mandato de Ángel Aguirre Rivero. El primero de
plano dijo que ni quería ni podía
resolver el tema de la inseguridad, mientras que el segundo prefirió sus
fiestas y delegarle a su sobrino Ernesto
Aguirre Gutiérrez los asuntos de gobierno.
Algo que no se ha esclarecido es el Caso Iguala. Y aunque no es de la
competencia estatal, sino de la Federación, urge que se resuelva. Ya fue suficiente
que intereses nefastos se aprovechen del dolor de los padres de los 43
normalistas desaparecidos para delinquir y retar al Estado.
Guerrero ya no debe ser rehén de la
Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG), del Movimiento Popular
Guerrerenses (MPG) y de otras agrupaciones que sólo buscan satisfacer sus
intereses. Urge aplicar
todo el peso de la ley en contra de esos personajes que pretenden
desestabilizar a Guerrero y al país entero.
El PRD fue muy complaciente con esos grupos. Por eso la mayoría de los
electores decidieron darle el voto de castigo el pasado 7 de junio, y darle
otra oportunidad al PRI.
Ojalá Héctor Astudillo elija muy bien a su
gabinete, en especial a los de Seguridad Pública, Gobierno, Finanzas y
Desarrollo Social, y no
permita actos de corrupción y abusos de autoridad.
No debe olvidar que en campaña le pidieron encabezar un gobierno que
esté cerca de la gente y que no sea intolerante.
Por eso digo, que Héctor Astudillo tiene la gran oportunidad de llevar a
Guerrero por un mejor camino. Y, lo bueno de todo, tendrá en el Poder
Legislativo a un gran aliado para sacar las iniciativas de ley que beneficien a
los guerrerenses. Y no se diga el apoyo del presidente Enrique Peña Nieto.
Faltan exactamente 12 días para que asuma la gubernatura. Un día que
muchos esperan. Y un día que el PRD no quisiera que llegara. ¡Zas!
‘LAYÍN’ QUIERE SER GOBERNADOR
El que ya anunció que buscará ser candidato a la gubernatura de su
estado en 2017, es Hilario Ramírez
Villanueva, ‘Layín’, alcalde de San Blas, Nayarit. Sí, así es. Me refiero
al personaje que confesó hace unos meses que, cuando fue por primera vez
presidente municipal “robo poquito”.
En la elección del 7 de junio ganó siendo candidato independiente. Hace
6 años llegó a ser alcalde con las siglas del PAN.
Quiere emular al gobernador de Nuevo León,
Jaime Rodríguez Calderón, ‘El Bronco’.
Hay que reconocer que ‘Layín’ es querido en su tierra, ya que le gusta
hacer fiestononones y repartir dinero a sus paisanos. A ver qué tal le va al
controvertido personaje.
Comentarios: E-mail:
efrain_flores_iglesias@hotmail.com; Facebook: Efraín Flores Iglesias; Twitter:
@efiglesias
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